El domingo volvía Jenni Hermoso a una convocatoria con su club mexicano, el Pachuca, donde tuvo un recibimiento espectacular de la afición con pasillo incluido de las jugadoras de Pachuca y Pumas para rendir homenaje a la campeona del mundo.

En su reaparición en la cancha de Las Tuzas, la afición la recibió con una enorme pancarta en la que aparecía la futbolista madrileña celebrando el Mundial de fútbol que ganó la selección española femenina en Sídney hace pocas semanas, además de una gran ovación por parte del público y de todas las jugadoras de ambos equipos. Y es que Jennifer Hermoso se ha convertido en una futbolista muy querida y valorada a nivel mundial por sus éxitos deportivos y un símbolo feminista por su valentía para hacer frente al machismo que se vive en este deporte.

Además, el partido acabó con final feliz para el conjunto local, ya que venció el Pachuca 2-1 al UNAM en su tercera victoria consecutiva que colocan a Las Tuzas en sexto lugar en la clasificación de la Liga de Fútbol Femenil mexicana. Un día inolvidable para la futbolista de la selección española por el hermoso homenaje que le preparó su afición y las muestras de cariño recibidas en su regreso a México.

La otra buena noticia para el fútbol en general y para el fútbol femenino en particular llegó ayer por la noche con el anuncio de la dimisión de Luis Rubiales como presidente de la RFEF y vicepresidente de la UEFA. Empieza una nueva etapa en el fútbol español que esperemos sea libre de machismo, prepotencia y corrupción.

En cualquier caso, el espectacular recibimiento a Jennifer Hermoso en su regreso al Pachuca Femenil mexicano indica que cada vez hay más afición en todo el mundo por el fútbol femenino y que el beso no consentido de Luis Rubiales a la futbolista española ha sido noticia a nivel global, no solo en España.