La RFEF, mediante su presidente interino, Pedro Rocha, ha hecho oficial la destitución de Jorge Vilda, quien desde hoy ya no será el entrenador de la selección de fútbol femenino.
Se despide así de los 500.000 € mensuales que le había prometido Luis Rubiales en su discurso antifeminista del 25 de agosto, ya que el expresidente de la RFEF, su único valedor, pretendía renovarlo mejorando su contrato de 170.000 € a medio millón de euros.
Precisamente, en la bochornosa asamblea de la RFEF que convocó Luis Rubiales, en la que anunciaba que no iba a dimitir y cargaba contra el feminismo culpando a Jenni Hermoso, el propio Jorge Vilda aplaudió intensamente, al igual que el seleccionador de España en fútbol masculino, Luis de la Fuente, quien de momento continuará en su puesto.
Jorge Vilda nunca fue del agrado de las futbolistas de la selección española de fútbol femenino, muchas de ellas renunciaron a ser convocadas para el Mundial de Australia y Nueva Zelanda 2023, que tuvo un final feliz con la victoria épica de España en la gran final ante Inglaterra. Se quejan de un control excesivo a las jugadoras, ya que incluso les hacía dormir con la puerta abierta hasta las 00:00 en las concentraciones para asegurarse de que permanecían allí. Además, pese a haber ganado el Mundial, son varias las jugadoras y expertas en fútbol femenino que aseguran que sabía muy poco de fútbol el ya ex seleccionador español y que sus estrategias o tácticas no eran nada útiles.
Tuit sobre el polémico vídeo de Jorge Vilda tocando un pecho a la segunda entrenadora de la selección española, Montse Tomé
Parece claro que Jorge Vilda no es una persona que represente los valores de respeto e igualdad en el deporte que necesitan las chicas de la selección de fútbol femenino, las jugadoras merecen otra entrenadora o entrenador con quien se identifiquen mucho más y les haga disfrutar aún más de sus logros deportivos.
Ni Luis Rubiales ni Jorge Vilda han estado a la altura y han empañado un momento histórico del fútbol femenino y el deporte español, como es el primer Mundial ganado por la selección española en la historia, tan solo 2 años después de que se profesionalizara el fútbol femenino en España, el 15 de junio de 2021. La destitución de Jorge Vilda y la inhabilitación de Luis Rubiales por parte de la FIFA son muy positivas para aspirar a tener un deporte más inclusivo e igualitario de cara al futuro en nuestro país.
Parece que estamos más cerca de que las 23 campeonas del mundo con España que, en un comunicado emitido por la asociación Futpro, renunciaron a la selección por el caso Rubiales y su beso no consentido a Jenni Hermoso, mientras no hubiera cambios estructurales y reales en la REFF, vuelvan a estar disponibles para quien se haga cargo del equipo.
Se deberá confirmar, eso sí, la inhabilitación definitiva de Luis Rubiales como presidente de la RFEF, pues hasta ahora solo tiene una sanción de 90 días de la FIFA, ya que el TAD ha considerado "falta frave" en vez de "falta muy grave" su conducta machista y cavernícola en el palco del estadio de Sídney, en la final España-Inglaterra en la que avergonzó a todo un país delante de todo el mundo, y el Gobierno no ha podido destituirle a través del CSD, como era su voluntad.
De momento, la única destitución confirmada es la de Jorge Vilda como seleccionador español de fútbol femenino. Y la noticia es que ya hay sustituta, se hará cargo del equipo nacional la hasta ahora segunda entrenadora: Montse Tomé. Por fin tendrán seleccionadora en lugar de seleccionador las campeonas del mundo. Una nueva victoria del feminismo y algo muy positivo para el fútbol y el deporte en general.
